VECINA SORPRENDIÓ AL LADRÓN

Ni gato, ni viento: lo que despertó a una vecina de nuestra ciudad cerca de las 4 de la mañana no fue otra cosa que un ladrón de gorro de lana y paso sigiloso, que decidió irrumpir en su casa del Pasaje del Mar como si se tratara de un tour privado en plena madrugada.
La mujer, que se encontraba en el living junto a su hijo menor, no necesitó más que asomarse a la cocina para encontrarse con el visitante no invitado. El hombre, al verse sorprendido, no ofreció resistencia, ni palabras. En un estilo digno de fuga de película muda, se esfumó con lo primero que encontró a mano: un celular Redmi con carcasa roja y un par de anteojos con marco marrón.
La víctima llamó de inmediato a la Policía. Mientras los agentes de la Comisaría Segunda tomaban nota del relato, el destino —o el descaro del ladrón— quiso regalarles una escena insólita: un sujeto pasó caminando frente a la vivienda como quien no teme nada, o no comprende mucho.
Tenía el gorro de lana, los guantes blancos de trabajo, el celular sustraído y los anteojos de la vecina. Parecía más un actor que no supo cuándo terminó la escena del crimen.
Tras requisarlo, los agentes confirmaron que los objetos coincidían plenamente con lo denunciado. La damnificada no tuvo dudas al reconocer sus pertenencias, lo que permitió vincular de inmediato al sospechoso con el robo.
La fiscalía dispuso su detención hasta que se celebre la audiencia de control, que tendría lugar en el transcurso del día.
Aunque el sujeto no dijo ni una palabra durante el robo, sus bolsillos hablaron por él.