SORPRESA: UN GATO MONTÉS APARECIÓ EN BARRIO PARQUE

Vecinos de Puerto Madryn vivieron horas de sorpresa y asombro al advertir la presencia de un gato montés en pleno casco urbano. El felino silvestre fue visto durante las últimas horas merodeando patios, techos y pasajes internos de manzanas comprendidas entre las calles San Martín, Lavalle, Marcos A. Zar y Lewis Jones.
El avistamiento generó tanto curiosidad como preocupación entre los residentes, quienes compartieron imágenes y relatos del inesperado visitante a través de redes sociales y grupos de WhatsApp.
Desde la organización Refaunar solicitaron expresamente a la comunidad no intentar capturarlo ni interactuar con el animal, dado que se trata de una especie silvestre con comportamientos distintos a los de un gato doméstico. “Pedimos que se comuniquen de inmediato con el 103 y eviten cualquier acción que implique contacto directo”, recomendaron.
El animal mantiene una conducta típicamente esquiva, como es común en la especie Leopardus geoffroyi, también conocida como gato montés sudamericano, que integra la fauna autóctona de la Patagonia. Aunque su tamaño y pelaje moteado puedan hacer que a simple vista se lo confunda con un felino doméstico, su comportamiento es completamente distinto.
El ingreso a la zona urbana podría deberse a la búsqueda de alimento o refugio, en un contexto de presión sobre los hábitats naturales aledaños a la ciudad. Si bien no representa un peligro directo para las personas, su presencia implica riesgos para él mismo y para el entorno, sobre todo si alguien intenta acorralarlo o interactuar sin los conocimientos adecuados.

Actualmente, se trabaja en monitorear sus movimientos para garantizar una captura segura y su posterior reubicación en un ambiente más adecuado, donde pueda continuar su vida sin peligro.
Este tipo de episodios invitan a reflexionar sobre el impacto urbano en la fauna silvestre y la necesidad de contar con protocolos claros de actuación ante la presencia de animales autóctonos en espacios públicos.
Desde las organizaciones ambientales instan a la ciudadanía a mantener la calma, no difundir datos imprecisos ni generar alarma, y sobre todo, colaborar con las autoridades para garantizar el bienestar del ejemplar y de la comunidad.